Me siento cada vez mas sorprendida de cuanta gente conozco y todo lo que traen consigo. Ambientes, música, anécdotas, costumbres, gustos, todo te lo transmiten, te comparten una parte de su mundo y lo dejan en el tuyo y arreglate como quieras, pon todo eso donde te pegue en gana y usalo y desúsalo a tu antojo. Y si mejor te conviene, abrete y dile adios a ese mundo o en su defecto unete y aporta con tus ideas, con tus recuerdos, con tus sentimientos, con tus traumas y tus miedos, aportas tu mundo. Como dejar un hilo en cada persona que conoces y con el paso del tiempo los hilos se enredan, se pierde el rumbo y despues se reencuentra. Presentas a dos personas que resultan ser amigos desde niños o conocidos siquiera. Me he vuelto mas selectiva, en la universidad me aislaba de mis compañeros por que sentía que no valía la pena regalarles mi mundo, que es solo mío... antes no era así, antes yo era la niña mas social que había, platicaba con quien sea y saludaba a muchas personas a mi paso, a la fecha lo sigo haciendo pero hay momentos que me sumergo en mis ideas y mis pies caminan automaticamente y mis manos olvidan a la gente y se esconden en mi pantalón, en el sweter o donde se queden atoradas. A veces creo que perdí una chispa, algo de mi que no se a ciencia cierta lo que es, es como un sentimiento, como una emoción que me acompañaba a todos lados, una inocencia, problemillas cualquiera que mantenían ocupada en mi mundo bonito, todo rosita. Ahora me preocupo también por cosas que eran desconocidas para mi como cambiar un fusible, un foco, una extensión electrica, revisar que la puerta tenga llave, las luces apagadas, soy la señora de mi casa y si quiero pararme de cabeza y bailar tango lo hago. Pero también extraño la casa de mis padres, despertarme tarde y encontrarme en la cocina a mi madre preparando el desayuno y a mi padre leyendo el periódico, arreglarnos en el cuarto de mi madre toda la bola de viejas para ir comer o la playa. Las platicas de política en las que incursiono desde hace pocos meses. Las cenas en familia, el ver una pelicula y preparar palomitas o salchichas con pepino y mucho chile. Salirnos todos al porche en la tarde a platicar y de repente llegaba un tío o primo y se unía a la causa. Sin darnos cuenta han aparecido unos enanitos por ahí, mis sobrinos, esos niños preciosos que tanto amo. Con sus fuerzas y sus gestos que todos festejamos. Las navidades cada vez me parecen mas nostálgicas, tal vez por que ya no vivimos todos juntos y nos vemos solo en vacaciones. Ahora le guardo un respeto diferente a mis padres, mas solemne, mas cálido y también mas emotivo. Cuando veo a mi madre no puedo dejar de abrazarla, darle besos enfadosos, agarrarle la mano o jugar con su cabello. Mi padre se deja querer mas, somos igualitos de empalagosos y duramos agarrados de la mano hasta que nos sudan o cuando me pasa la mano por el hombro y me siento protegida, en mi edad de preparatoria sin embargo me daba pena que mis amigos vieran que mi papi me abrazaba y le quitaba la mano y el se sentía triste, lo veía en su cara y trataba de explicarle que me daba pena que mis amigos pensaran que era una niña consentida aunque era cierto. Siempre he sido su consentida. Los ultimos meses siento que me han olvidado mis padres, no me llaman en toda la semana y a veces tengo ganas de decirles que me hacen falta, que necesito decirles tantas cosas, que me ayuden a salir de mis adicciones, que tengo miedo, que a veces no se quien soy y a veces me siento muy bien y tambien quisiera decirselos, tengo muchos triunfos en mi vida y voy por más. Me siento contenta con mis logros y con la persona en que me estoy convirtiendo, gracias a estos cambios, como estar enmedio de un circulo de gente donde todos bailan y echan golpes a todos lados pero todos siguen un mismo sentido (Creo que se llama slam, se acostumbra hacer en las tocadas de rock), mientras corren y tu entras y sales por otro lado y con otra ropa y otras costumbres y una agenda distinta. La vida me ha enseñado que puedes ganar y perder en todo momento, que nada lo tenemos para siempre ni seguro, te puede quitar y arrancar lo mas preciado a su antojo, como burlandose de ti y la verdad no puedes hacer mas que adaptarte, por que estamos en constante movimiento y si no te emparejas te quedas atrás y eso no se me antoja experimentarlo. Me he vuelto mas callada y contradictoriamente mas confianzuda con las personas a las que selecciono como amigos, a veces digo lo que pienso sin darme cuenta y pienso en voz alta y he hecho reir, enojar, ofender, carcajear a mis amigos con mis pensamientos que mutan en palabras a la velocidad de la luz. Ultimamente escucho psycho y se me aceleran las tripas y se ponen a bailar conmigo aunque este sentada y la sangre corre a ese ritmo también. Me he puesto a escuchar canciones que me gustaban en la secundaria de los strokes, white stripes, jet, esas canciones que marcaron cada etapa de mi vida y cada una tiene una anécdota pegada. He escuchado a Santana también y en este preciso momento escucho a Clapton, la canción que escribió a su pequeñito de 3 años que murio cuando cayo desde un onceavo piso. Cuanto dolor con esa canción "Lagrimas en el cielo". Hasta el cielo dedico esa canción a un angelito. Ando medio sentimental, tal vez mis hormonas se estan divirtiendo conmigo. Me han dicho en estos ultimos días que estoy como a la defensiva y me dejaron pensando. No se de quien me defendo, y no se de qe huyo tampoco, por que me gusta estar distante de los demás y sentirme protegida con mi música y mis pensamientos solo en mi cabeza, y guardar mis comentarios nada mas para mi, los que llegan y tocan fibres sensibles de mi corazón, como darme cuenta de golpe que viví maltrato intra-familiar, que vivi hambres por culpa de mi padre que se perdía días enteros con sus amantes o amigos. Mi vida no ha sido fácil aunque paresca que no, que soy una mujer sencilla, platicadora, relajada, no señores, he vivido cosas muy fuertes, he llorado muchisimas veces, la mayoría de cosas las pude haber evitado, pero el hubiera no existe no me queda otra que tomar lo bueno de cada cosa que me ha hecho sufrir, y sacarle el máximo provecho. Soy segura de mi misma aunque a veces flaqueo y me siento confundida. Amo caminar por la calle y ver a la gente y sus rostros tan diferentes, el solo ver a una persona e imaginarme su vida como en las peliculas cuando alguien toca a otra persona y puede ver como si fueran flechazos todo lo que ha pasado en su vida en segundos. Me fascina ver a las personas e imaginar que irán pensando, inventar toda una historia y comenzar otra cuando veo a otra persona y asi, ver como somos tan pequeños y como hay tanto cielo arriba de nuestras cabezas despues cerrar los ojos y respirar hondo... y sumergirme de nuevo en mis recuerdos para despues dejarlos en este espacio, su espacio, esta caja donde aviento sucesos que vagan suspendidos por el tiempo en mi cabeza, ese tiempo que me ha llegado por la espalda y me ha cerrado los ojos con las manos y me ha dicho -adivina quien soy...- y yo volteo y lo miro de frente y le digo... sabía que eras tu, pero no pense que llegarías tan rápido mi estimado...
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