Hoy me levante sintiendome bella, seleccione mi vestuario con placer creativo, puse el perfume en mi piel absorviendo el aroma con un exquisito inhalar de poros nasales. Y te regale una mirada solo por provocarte. Y fue en ese momento en que me sentí mujer, toque mi escote pronunciado y recorri con mis manos la cintura, la mía y despues la tuya. Abrace esa espalda ancha con mis piernas dejando escapar un gemido, y mi reflejo en el espejo de enfrente me dijo que estaba a punto de hacer el amor, me excito verme contigo en esa situación esperada, recreada, asi era precisamente. Eres mas fuerte de lo que pensaba y mas salvaje tambien, tienes una energía reprimida de felino en celo y haces que mis garras de gata paciente se revuelvan en las aguas de mis humedades. Me tocaste, me mordiste, me respiraste toda, y yo era feliz en ese instante, es nuevo para mi sentirme mujer despues de amiga, compañera, hermana, hija, prima, tía, empleada, un numero estadistico mas... el mas importante de todos, ego? Yo solo se que me gustaba abrazarte fuerte y no despegarme de ti como sanguijuela, quizas pensaste que no me daba cuenta cuando desabrochabas tus botones y tu mano intento recorrer mis pliegues femeninos, hoy no... te dije, y me levante de la cama de un salto para irme a la cocina a seguir escribiendo estas letras mientras tu imaginabas fantasías ahogadas en tus manos autoplacenteras. Lo siento, hoy no quiero tanto.
